Abrazando el Diseño de Dios Parte 3: El Verdadero Éxito
El ver dadero Éxito Érase una vez un conejo y una tortuga que decidieron competir en una carrera y como era de esperar, el conejo se burló de la tortuga, porque no le vio potencial para ser su digno competidor, sin embargo, la tortuga siempre mantuvo una buena actitud y decidió continuar con la competencia, al final de la historia la tortuga alcanzó la meta. Como mujeres, al nacer traemos el diseño divino de Dios, por medio del cual Él cumple Su plan redentor y Sus bellos propósitos en cada una de nosotras, sin embargo, a lo largo de nuestra historia de vida nos apartamos de ese diseño, como el conejo, confiamos en nuestras capacidades y somos permeadas por la cultura antibíblica de este mundo. Es así como vamos construyendo ideas equivocadas para nuestra vida, ideas que se implantan en nuestros corazones, pensamientos y deseos, echando raíces que no nos honran como mujeres ni honran el diseño divino que Dios quiere que desarrollemos. Igual que le pasó al conejo, quien